Tomás Milián (1933-2017) fue un actor cubano que destacó por sus personajes muy peculiares en los spaghetti westerns en los que participó.
Debutó en el género en "El precio de un hombre", del director español Eugenio Martín. Su papel de bandido le valió para darse a conocer, y ese mismo año logró un papel que le marcaría a lo largo de su carrera, papel que no es otro que el mexicano "Cuchillo" de "EL Halcón y la presa". Milián hace una magnífica interpretación de el personaje, tanto que eclipsa a Lee Van Cleef, supuesto protagonista en un principio de la película. Y es que "Cuchillo" ríe, llora, corre, y hasta se revuelca por el suelo, todo de forma desproporcionada, pero acorde con el personaje. Fue tal el éxito, que un año después el propio "Cuchillo" protagonizó una segunda parte, ya como estrella absoluta de la producción.
En el año 1970 rueda junto con Franco Nero "Los compañeros", en el que toma el rol de un vasco en el oeste.
Y su periplo por el western europeo termina con un papel en "Los cuatro del Apocalipsis", pero vaya papel. Chaco es un despreciable mexicano, sin escrúpulos ni remordimientos. Milian hace de nuevo una gran interpretación, y se despide del genero de forma genial.
Después, el actor se quedó en el cine italiano, sobre todo en el policíaco, y ha seguido trabajando hasta el año 2005 tanto en Europa como en norteamerica. (Reseña extraida de 800 spaghetti westerns).
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