Triste noticia la desaparición del productor/director/distribuidor Roger Corman.
Cuando se le preguntó cómo le gustaría ser recordado, dijo: "Fui cineasta, sólo eso".
Dirigió El hombre con rayos X en los ojos (1963) donde un científico auto experimentaba con un medicamento y conseguía ver demasiado. Siguieron otros títulos como La máscara de la muerte roja (1964), La tumba de Ligeia (1964) o Secreta invasión (1964). Su última película fue La resurrección de Frankenstein (1990).
Roger Corman nació en Beverly Hills, California. , cuando tenía 14 años, tras obtener un diploma en ingeniería, cumplió el servicio en la Infantería de Marina durante tres años, y se integró en 20th Century Fox y siendo joven, tras realizar un viaje al Reino Unido y a Francia, regresó a suelo americano y rápidamente se apoderó del mercado de producción de Hollywood con películas rodadas con una presunción débil y dirigida en varios días, Machine Gun Kelly (1958), La pequeña tienda de los horrores (1960), La caída de la casa Usher (1960) o incluso The Intruder (1962) y The Fast and the Furious de John Ireland (1954), Dementia 13 de Francis Ford Coppola (1963) o la serie cinematográfica Big Bad Mama (1974).
El llamado rey de la Serie B produjo, a través de la Concorde Pictures, muchas películas que posteriormente eran carne de videoclub: Los siete magníficos del espacio, Humanoides del abismo, Piraña, La galaxia del terror, Amazons, The Deathstalker, Barbarian Queen, El guerrero y la hechicera...
Roger Corman, un formidable buscador de talentos, lanzó las carreras de directores ahora reconocidos en todo el mundo, como Martin Scorsese, Ron Howard, Francis Ford Coppola, Joe Dante, Ron Howard, James Cameron y Jonathan Demme. También lanzó las carreras de los actores Vincent Price, Robert De Niro y Jack Nicholson, a quienes ofreció sus primeros papeles importantes en el cine. Su última aparición se remonta a mayo de 2023 durante la ceremonia de clausura del Festival de Cannes para entregar el Gran Premio a Jonathan Glazer por su película La zona de interés. Lo acompañaba Quentin Tarantino, quien lo consideraba su héroe. "Qué alegría compartir este escenario con Quentin. Mi cine no conoce inhibiciones, está lleno de excesos, de risas y tengo la impresión de que Cannes también lo está. Es el festival de cine más interesante del mundo y tú Todos somos afortunados de poder ser parte de esto”, declaró emocionado.
En 1993 vino a Valencia, durante el festival Cinemajove, para presentar una retrospectiva sobre su obra. Me firmó un ejemplar de su libro "Cómo hice 100 películas en Hollywood y nunca perdí un centavo". También coincidí con él en el festival de Sitges de 2010, donde recibió el premio "La máquina del temps".
DEP.
